The Hand That Rocks The Cradle
Película: The Hand that Rocks the Cradle. Dirigida por: Michelle Garza Cervera. Protagonizada por: Maika Monroe, Mary Elizabeth Winstead. Duración: 1hr. 45min. Drama. ¿Donde la veo?: Disney +
Si alguna vez usted se ha preguntado el por qué el cine está en su peor momento, esta película bien pudiera funcionar como un gran ejemplo didáctico. Le explico. Para empezar, es un refrito de una gran producción que se realizó en 1992, donde, con grandes actuaciones y un guion meticulosamente bien construido, capturaron a la audiencia y le regalaron un gran thriller que supera la barrera del tiempo. Con esto quiero decir que, esta versión era absolutamente innecesaria. Nadie la pidió. La original sigue, y seguirá, vigente.
Pero su problema no es la falta de una premisa original. Su problema es lo mal hecha que está, y la falta de corazón y sello artístico. Empezando por el guion, que es patéticamente mediocre. Sin emoción o justificación. Sin esencia, y enfocado a adoctrinarnos con ideas Woke que ni siquiera se tomaron el tiempo de disfrazarlas sutilmente. La dirección es amateur (a pesar de que la realizadora, Michelle Garza Cervera, alcanzó su mejor momento con la cinta Huesera). Parece como si no supiera donde poner la cámara, y que basó estas decisiones en un libro de texto de dirección básica para principiantes. No hay emoción, lenguaje cinematográfico, ni una fotografía creativa. Nada.
Esta combinación de mediocridad con adoctrinamiento nos receta una historia en donde vemos a un marido holgazán que no tiene empleo, se la pasa de aviador en su propia casa, y tiene pinta de “hobo”. A pesar de su tiempo libre, no solo no ayuda en las tareas del hogar, de hecho estorba. También nos presentan a una protagonista ama de casa que tampoco trabaja, y su viacrucis diario es hacerle de comer a sus hijas y al huevón del marido. Esto la agobia tanto que se ve forzada a contratar a una absoluta desconocida como niñera. No, no estaba buscando a una, simplemente al verla se le ocurrió que la jovencita podía hacerse cargo de su hogar y su familia. Y así se desata una historia llena de inconsistencias y ridiculeces, en donde suceden cosas como que un tipo, por la simple sospecha de su amiga, se da a la tarea de comprar un kit de análisis de DNA y, sin saber como usarlo, en 5 minutos descubre la identidad y el perturbador historial de la sospechosa. Y en lugar de avisar a la víctima, decide, no muy inteligentemente, citarla en su casa, en secreto, para darle la oportunidad de justificarse.
Podría hacer una larga lista de estupideces sin sentido que suceden, pero no me alcanza el tiempo. Lo que sí le puedo decir es que la evite a toda costa. Que no caiga en su publicidad. Que no se deje llevar por el título, ya que no tiene relación alguna con la magistral obra original de la guionista Amanda Silver. No, esta la escribe un tal Micha Bloomberg, que tiene nulo talento y muchas ganas de adoctrinar a la gente con su manera de pensar.
Como le digo, si alguna vez se ha preguntado cómo es que la industria del cine está tan mal, esta cinta es una muestra perfecta de las razones.


